THE CHARADE
22 July 2007 | Por 360 grados | Categorías: 00's, Discos, Grupos, Pop NórdicoMuchas veces se ha hablado ya de la “Cuestión Suecaâ€, lo ciertos es que esta ola de nuevos grupos provenientes del frÃo paÃs nórdico parece haber perdido fuelle; las novedades ya no caen en cascada como corto tiempo atrás y algunos segundos trabajos no son tan celebrados como sus predecesores (Vapnet o Montt-Mardie, por citar los primeros que vienen a la mente). Pero la realidad es que la escena sueca sigue mostrándose lo suficientemente activa en cuanto a calidad y cantidad como para seguir prestándole atención, y muy probablemente todo siga asà mientras el estado del bienestar y el clima no sufran variaciones significativas en Suecia. AsÃ, mientras que algunos, probablemente con razón, puedan seguir intentando centrar su crÃtica en todo el movimiento excesivamente amateur del lo-fi sueco, es evidente que a estas alturas el Pop (que en definitiva es lo que aquà se trata) por aquellas tierras ha dejado de mostrarse clónico para abrazar influencias y expresiones mucho ricas que las de aquel primer Indie Pop de manual que marcó sus inicios.
Toda esta evolución no debiera de hacernos olvidar el pasado, más en 360º de Separación, donde pese a que en los últimos tiempos se deambula por el presente, siempre hay tiempo para la vuelta al pasado que nos ha hecho crecer musicalmente como somos. De este modo hoy toca dar repaso a la hasta ahora breve carrera de The Charade, una banda de plena actualidad con fuertes lazos “históricos†y estilÃsticos con el pasado que alumbró las primeras muestras de Indie Pop sueco en los cada vez más lejanos años 90’s. Y hablamos de estas primeras muestras no en términos absolutos ni queriendo sentar cátedra, si no desde la perspectiva de la experiencia personal de cualquier aficionado al Pop que allá por la primera mitad de los 90’s descubrió que, al igual que en otros paÃses de mayor tradición musical, Suecia también tenÃa una incipiente escena de grupos que habÃan crecido escuchando el Indie Pop británico de los 80’s. Teniendo conocimiento de la escena sueca de este modo, y aún a riesgo de atribuir erróneamente primeros pasos a bandas que no fueron punta de lanza, podemos decir que grupos como Acid House Kings, Red Sleeping Beauty o Seashells fueron los primeros en darse a conocer fuera de las fronteras suecas gracias a su Indie Pop candoroso a base de melodÃas extra azucaradas. Claro que con el tiempo hemos llegado a tener conocimiento de que habÃa otros grupos que jugaban con algunos años de ventaja, como Happydeadmen o Eggstone, mostrando una mayor madurez estilÃstica y superior fondo que aquellos jóvenes indie kids que habitaban Marsh-Marigold Records. Por desgracia el tiempo ha corrido en contra de algunos, principalmente de los primeros, que excepción hecha de Acid House Kings, uno de los mejores grupos Pop presentes, han quedado como hacedores de un Pop un tanto pueril que parece que solo puede ser disfrutado por aquellos que lo vivieron en su momento y que son capaces de apreciarlo con una necesaria contextualización, aunque por fortuna siempre habrá nuevos fans capaces de disfrutar de la sencillez sin más, sin necesidad de buscar trascendencia allá donde nuca la hubo.
Pero todo esto es hablar de un pasado que tiene como uno de sus frutos a The Charade, y es que el trÃo sueco tiene su origen en el encuentro casual en una fiesta de Magnus Karlsson y Mikael Matsson, ambos guitarristas en bandas mitificadas en mayor o menor medida como fueron Happydeadmen y Red Sleeping Beauty. Este encuentro genera en ambos un deseo por volver a producir canciones, ya que los dos guitarristas se encuentran momentáneamente sin grupo. Asà se decidirán a comenzar el proyecto de nueva banda, buscando en primer lugar una voz femenina para sus canciones, búsqueda que no es tal ya que el papel pronto recaerá en Ingela Matsson, la que fue vocalista de The Shermans, grupo post-RSB de Mikael, con el que acabará casándose tras años de militancia en los Shermans. Asà comienzan a rodar las primeras canciones que llamarán la atención de Skipping Sotnes Records, nuevo sello estadounidense que se presta a la rápida publicación del debut de The Charade. En Abril de 2005 The Best Is Yet To Come verá la luz (bueno, y no solo el disco, cuatro dÃas después de su publicación nacerá la primera hija de Mikael e Ingela), el disco es bien acogido con rapidez, gracias en parte al aura de “supergrupo†Indie que le precede por el pasado de sus integrantes. Obviamente ante la escucha de The Best Is Yet To Come la primera cuestión a resolver es la de la paternidad del sonido de The Charade, cabe preguntarse si estamos ante unos nuevos Happydeadmen o ante otros Red Sleeping Beauty, quedando descartado el más que agotado camino Twee que The Shermans tomaron y exprimieron como pocos. La respuesta a la cuestión no resulta clara, The Charade se alejan decididamente de la inocencia de unos primeros Red Sleeping Beauty, pero quedan muy cerca de la etapa final del grupo en Siesta Records, sin embargo las canciones abandonan el detallismo instrumental de esta última etapa para abrazar la elegancia más clásica y sencilla de Happydeadmen. En resumidas cuentas, el sonido de la banda picotea de aquà y allá sin poder encontrar una clara paternidad, por mucho que la voz femenina nos oriente más hacia los adoradores de McCarthy (RSB toman su nombre del fantástico tema de los ingleses).
Monday Morning abre el debut de la banda, convirtiéndose de inmediato en uno de los temas más celebrados del disco gracias a su irresistible melodÃa a cargo de Ingela que deja a las claras las intenciones de The Charade, un Pop luminoso y alegre de vocación jangle que sigue la estela de los más clásicos grupos indies suecos. What Do You See In Me? mantiene el nivel marcado por Monday Morning, superándolo puntualmente gracias a una letra que es pura inocencia y gracia anunciada por el propio tÃtulo de la canción, mientras que Night Time Confession ofrece a Magnus Karlsson la primera oportunidad de acompañar a Ingela a las voces, con un resultado que acentúa la melancolÃa del tema. En estos primeros compases el disco se desarrollará sobre las bases de un Pop asentado en un presente que cambia de tercio mirando al pasado con Stories Remain Untold, Lying On My Couch y, especialmente, When Trouble comes Our Way donde The Charade muestran su afición por un pasado, el de los 60/70’s que son fuente constante de inspiración a sus melodÃas y coros como los del último tema citado. On The Bar cambia completamente hasta hacernos recordar a unos Razorcuts que cada vez parecen más reivindicados, y The Saddest Story Ever Told es una pieza que bien pudiera haber aparecido en cualquiera de los últimos trabajos de Red Sleeping Beauty, gracias en parte a esa dulce melancolÃa que parece adueñarse de la banda mientras avanza el disco, sacándonos del espejismo de alegrÃa a las que las primeras canciones del disco parecÃan apuntar. AsÃ, este carácter se adueñará también de la recta final del disco tanto en la perfecta The Sun Is Gonna Shine On You…And Me o It’s Summer Again que parece la canción para una canción de verano….en Septiembre.
The Best Is Yet To Come cosechará buenas crÃticas durante todo el 2005, logrando colarse entre lo mejor del Indie Pop anual pese a que su música se muestra algo alejada de la corriente lo-fi/twee insustancial que parece hacer mella en las jóvenes bandas de sus compatriotas. Animados por el reconocimiento a su debut el trÃo tardará poco más de un año en completar su siguiente trabajo, y en Junio de 2006 A Real Life Drama está disponible para escuchar y poder comprobar que el primer disparo no habÃa sido fruto del azar. De igual modo, parece que la fecha de publicación tampoco se deba a la casualidad, y es que The Charade se están acostumbrando a mostrarnos sus canciones al inicio del corto verano sueco que tan bien le sienta a nuestros protagonistas. Lo primero que nos llamará la atención de este nuevo trabajo es su portada, las flores de The Best Is Yet To Come dan paso a un diseño que nos recuerda poderosamente al de la bandera Sueca, hecho que no parece casual cuando procedemos a la escucha del disco y nos encontramos con Dressed In Yellow & Blue, canción de apoyo para la selección de fútbol nacional que se convierte en el himno Indie oficioso del mundial. Obviando esta anécdota A Real Life Drama se presenta como digno sucesor, en forma y resultado, de su predecesor; abre My Song To You que al igual que sucedió con Monday Morning en su primer disco, vuelve a colarse entre lo más resultón del año, situando de nuevo a comienzo de disco a uno de los temas más instantáneos del conjunto, con el gancho ineludible de esas voces chica/chico en los que Magnus da el contrapunto perfecto a Ingela. Papel que se intercambia en A Tough Decision con Magnus alzándose protagonista con el apoyo en esta ocasión de la chica del grupo. Pero al igual que sucedió con anterioridad, esta (pequeña) energÃa inicial del disco poco a poco se torna suavidad en September o Stockholm July 2005 (recordemos que cerrando el anterior disco habÃa un Stockholm January 2005), o Rain On Your Parade, en la que juegan a vestir el sonido del grupo como si de unos Cardigans de segunda división se tratase. Love Always Happens So Fast (A Real Life Drama) vuelve a marcar un nuevo punto álgido con Magnuss, que parece cada vez más cómodo a las voces, como absoluto protagonista en canciones que no suelen salirse nunca del patrón estilÃstico que se marcó desde la primera canción escuchada de The Charade.
Hasta aquà la historia del grupo, durante estos dÃas The Charade, como ya hicieron con su segundo trabajo, siguen componiendo en silencio pero sin descanso, las canciones de su tercer trabajo que verá la luz durante el verano del presente año y que, por lo escuchado como avance, no decepcionará a los fans habituales de la banda. (El presente comentario será actualizado en cuanto esté disponible el nuevo Lp).
Yo nunca me canso del sonido Rickenbacker, con lo que es natural que tenga en gran estima a Magnus Karlsson (para completistas, escuchen su unión con el australiano Joe Algeri en el álbum de éste, ‘The Stockholm Years’), y que The Charade terminen haciéndose presentes en disco por mi habitación -en estos tiempos de tanto mp3. El digipack es otro punto a favor-, porque su segundo álbum me gusta mucho.
Ah, supongo que estaréis al tanto de “Dressed In Yellow & Blue” como himno oficioso de la selección sueca de fútbol. Si este tipo de detalles fueran trasladables a nuestro bendito paÃs, yo hasta me hacÃa aficionado y todo. Será que lo que no puede ser, no puede ser.
Saludos estivales,
Manolo.
Vaya Manolo, pues no te creÃa fan de The Charade. Disculpa el atrevimiento, pero te tengo por un verdadero “purista” (sirva esto como piropo), aunque entiendo que esa Rickenbacker es la que te hace caer en la tentación 🙂
Respecto a los “tiempos del mp3”, decir que ahora mismo estoy tentado de caer en sus brazos, ya no sé dónde meter los discos, y muchos de ellos los compro para luego casi ni escucharlos por falta de tiempo u oportunidad para poner el cd…..ya sé que siempre digo esto, pero a ver si me dedico a comprar dos o tres discos al mes, los realmente “imprescindibles” y el resto lo guardo en mp3. En fin, ya sé que no lo haré, pero serÃa la leche 🙂
Saludos,
Manuel Soleado
Hola Manolo, pues yo tengo casi el mismo problema con los discos que tu, falta de espacio, de tiempo y de dinero. Nada que no se solucione con una buena primitiva 🙂
En cuanto a Charade, solo tengo (en mp3) el the best is yet to come y me parece un discazo, como casi todos los que recomiendas.
un saludo,
Hola Manuel!
Que bueno, que bueno que hables tan bien y recuperes a The Charade, que injustamente a veces catalogan como una banda twee y edulcorada. Me encantan sus dos discos, sobre todo el segundo con mi favorita “Love Always Happens So Fast (A Real Life Drama)”.
Sobre la escena sueca… coincido con tu decepción respecto a Montt Mardie (salvo un tema, el disco es inescuchable aún cuando participan un montón de superestrellas del indiepop sueco, su forma de cantar me resulta absolutamente irritable)y el ep de Vapnet que me resulta muy aburrido, más de lo mismo. Pero siempre hay buenas bandas, Roque tiene un gran oÃdo para captarlas en sus cloudberries (Hari and Aino, Robert Church, The Medalist o Oh Custer por ejemplo y otras que pronto saldrán), pero recién están empezando y sacando singles o apenas tienen my space.
Saludos!
ps: Acabo de escribirte un mail por fin :-), perdón por la tardanza.
Hooola Alex y Romi,
Pues Alex, pues sÃ, mucho hay de problemas de espacio (o más bien de organización), pero sobre todo hay problemas de tiempo y ya estoy harto de apilar discos sin poder escucharlos….para luego ponerlos y darme cuenta de que la curiosidad me pudo al comprarlos y no llegan el nivel mÃnimo exigible. De esta vez no pasa, ahora sà que lo tengo decidido, voy a comprar lo que realmente vaya a escuchar en casa de principio a fin, y para experimentar el mp3 y asunto arreglado. Hace unos años me planificaba el año musical de la siguiente forma; compraba discos de mediados de Septiempbre a mediados de Junio, y los meses de verano desconectaba por completo de todo tipo de información y me dedicaba a recuperar todo lo comprado (escuchado o no) durante el año. La verdad es que era más sano que la vorágine de compras y seguimiento de la actualidad. Lo dicho, hoy desconecto hasta dentro de un par de meses!! 🙂
Romi, y eso que acabo de decir va por, entre otros, Montt-Mardie y Vapnet. Muy buenos discos de debut, sÃ, pero para lo que acaban de publicar pues me vale el mp3, me da igual que los discos estén baratos, que con la excusa esa no paran de llegar discos a casa que me quitan tiempo para escuchar lo REALMENTE BUENO. De todos modos ya sabes que yo poco tengo de renegado en esto de la música, y sigo apreciando muy buenas bandas en Suecia. Como siempre, solo hay que perder algo de tiempo en buscarlas….o que Roque te las traiga a casa. De todos modos no estarÃa de más que se relajase un poco sacando discos, que eso de tres cdr’s al mes como que estresa 🙂
Saludos,
Manuel Soleado
Hola de nuevo Manuel
Jajaj si es verdad Roque saca demasiados cloudberries al mes, no creo que me haga caso pero ya le dije que deberÃa parar un poco. No sé como serán los debuts de estas bandas, pero las que nombré y otras que editará pronto suenan muy bien, además se alejan del tÃpico sonido Labrador/Ikea pop.
Yo no tengo el problema de acumular discos que no escucho (salvo que me los regalen, en ese caso tengo muchas cosas sin escuchar), porque me salen bastante caros (sobre todo el shipping y si son en euros) y escucho en mp3 antes de comprar. La otra posibilidad es escuchar música en el trabajo, en eso si tengo suerte 🙂
Besos!